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¿Alguna vez has sentido una opresión involuntaria, pesadez o sensación de abultamiento en un músculo? A eso se le llama espasmo muscular, cualquier persona puede tener este tipo de calambres, por muchas razones y en varias partes del cuerpo.

Los espasmos son comunes en el abdomen, brazos, manos y pies. También puedes sentirlos en las pantorrillas, tendones isquiotibiales, cuádriceps y alrededor del área de las costillas. Muchos casos de espasmos musculares simples son causados por ejercicio intenso y deporte vigoroso. Paciencia, descanso, estiramientos suaves y masajes en el músculo pueden ayudar a aliviar el dolor.

Los espasmos musculares son un efecto secundario común de enfermedades crónicas como esclerosis múltiple, distrofia muscular y enfermedad de McArdle. Las personas con fuertes dolores de cuello y espalda, por lo regular sufren de espasmos musculares.  Las mujeres embarazadas usualmente, son más propensas a sufrir de espasmos musculares, debido al rápido aumento de peso. Cuando menstrúan, las mujeres sufren de calambres musculares debido a las contracciones uterinas, aunque la magnitud del dolor varía de persona a persona.

Aunque los espasmos musculares pueden ser dolorosos es posible aliviarlos con estos siete relajantes musculares naturales.

Manzanilla

La manzanilla es una hierba que desde la antigüedad, se ha usado para tratar muchas dolencias, incluyendo los espasmos musculares. Contiene 36 flavonoides los cuales son compuestos que tienen propiedades anti inflamatorias. Puedes darte un masaje en los músculos afectados con un aceite esencial de manzanilla para obtener un alivio de los espasmos. El té de manzanilla, también puede ayudar a relajar los músculos adoloridos.

Jugo de cereza

Las personas que se inscriben en maratones, entrenan vigorosamente, por lo regular estresando mucho sus músculos. El jugo de cereza puede ayudar a combatir la inflamación y el dolor muscular que es tan común en los corredores. Los estudios revelan que tomar jugo de cereza puede minimizar el dolor que se siente después de correr. Las cualidades antioxidantes y anti inflamatorias de la fruta ayudan a relajar los músculos de forma natural.

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Malteadas de arándanos

Otra forma dulce y natural de relajar tus músculos es comiendo arándanos. Un estudio reciente sugiere que tomar una malteada de arándanos antes de hacer ejercicio puede ayudar a acelerar la recuperación después de que se han dañado los músculos. Los arándanos tienen propiedades antioxidantes, las cuales han sido demostradas, reducen el estrés oxidativo y la inflamación.

Pimienta de cayena

La capsaicina, una sustancia encontrada en la pimienta de cayena es un relajante muscular natural que por lo regular se recomienda a las personas que sufren de fibromialgia y artritis reumatoide. Se puede agregar a la comida, como en esta receta de camarones a la parrilla con crema de lima o puedes encontrar pimienta de cayena en cápsulas y cremas. Cuando se usa como crema  puedes aplicarla en las áreas afectadas por los espasmos musculares.

Vitamina D

Las personas que tienen dolores o espasmos musculares regularmente pueden tener una deficiencia de vitamina D.  Esta vitamina viene en varias presentaciones, incluyendo líquidos, pastillas y cápsulas. También puedes obtenerla de los alimentos como huevos,pescado y leche fortificada. Otra forma de obtener vitamina D es ¡estando bajo el sol!

Magnesio

El magnesio es vital para la nutrición humana y es un gran relajarte muscular natural, ya que mantiene las funciones musculares y nerviosas normales. Aunque es raro, los primeros síntomas de personas que tienen deficiencia de este mineral incluyen dolor muscular. En su mayoría, este mineral se encuentra en alimentos como las bananas, almendras verduras y arroz integral.

Descanso

Quizás la mejor y más natural forma de relajar tus músculos es descansar. Asegúrate de dormir mucho, tomar muchos líquidos e intenta no forzar el músculo afectado. Usar almohadillas de calor o hielo en el músculo, puede dar un alivio inmediato. Algunas veces los espasmos musculares se deben a músculos que han sido sobre estimulados y el hielo puede ayudar a calmar la transmisión de los impulsos del cerebro al músculo hiperactivo.

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